viernes, 25 de agosto de 2017

Sobre la noche de los tiempos

El tiempo del no tiempo
Según Don Genaro
HISTORIA DE LA ETERNIDAD. (Formación decimal astronómica)
Fragmento-73
LAS FUNCIONES ESPACIALES DEL PARAÍSO
“El espacio no existe en ninguna de las superficies del Paraíso. Si uno «mirara» hacia arriba desde la superficie superior del Paraíso, no «vería» nada sino espacio desocupado que entra o sale y que, en este momento, entra. El espacio no toca el Paraíso, sólo las zonas quiescentes (es decir está quieto pero pudiendo tener movimiento. Quiescencia) del espacio intermedio entran en contacto con la Isla central. El Paraíso es realmente el núcleo inmóvil de zonas relativamente quietas que existen entre el espacio ocupado y espacio desocupado. Geográficamente -continúan estas brillantes entidades de Uversa- estas zonas parecen ser extensión relativa del Paraíso. Pero probablemente tengan algún movimiento. Sabemos muy poco acerca de ellas. 

Pero observamos estas zonas de reducida moción espacial separan el espacio ocupado del espacio desocupado. Zonas similares existieron antaño entre niveles del espacio ocupado. Pero ahora son menos quiescentes. Un corte vertical del espacio total se asemejaría ligeramente a la cruz maltesa donde brazos horizontales representan el espacio ocupado (universo) y brazos verticales representan el espacio desocupado (depósito). 

Las áreas entre cuatro brazos los separarían en forma semejante a zonas del espacio intermedio separan el espacio ocupado del desocupado. Estas zonas quietas del espacio intermedio se van agrandando más a medida que aumenta la distancia del Paraíso y, finalmente, abarcan fronteras de todo el espacio y encierran completamente, los depósitos espaciales, como toda la extensión horizontal del espacio ocupado. El espacio no es ni una condición subabsoluta dentro del Absoluto No Cualificado, ni la presencia de éste, ni tampoco es función del Último. Es una dádiva del Paraíso y se cree el espacio del gran universo y todas regiones exteriores verdaderamente se impregnan de ancestral potencia espacial del Absoluto No Cualificado. 



Desde un acceso cercano al Paraíso periférico este espacio ocupado, se extiende horizontalmente hacia afuera a través del cuarto nivel espacial y más allá de la periferia del universo maestro. Pero no sabemos cuánto más alla. Si imagináis un plano en forma de V finito, pero inconcebiblemente grande, ubicado en ángulo recto, respecto de superficie superior e inferior del Paraíso con la punta casi tangente al Paraíso Periférico y luego imaginad ese plano en revolución elíptica alrededor del Paraíso, su revolución esbozaría aproximadamente el volumen del espacio ocupado. Hay un límite superior y límite inferior del espacio horizontal con referencia a cualquier lugar dado en los universos. 

Si uno pudiera moverse lo bastante lejos en ángulo recto respecto del plano de Orvonton, ya sea hacia arriba o hacia abajo, podría encontrar finalmente el límite superior o inferior del espacio ocupado. Dentro de dimensiones conocidas del universo maestro, estos límites se separan cada vez más del Paraíso. El espacio se espesa poco más rápidamente que el plano de la creación, los universos. Las zonas relativamente quietas entre niveles del espacio, tal como la que separa a los siete superuniversos del primer nivel del espacio exterior, son enormes regiones elípticas de actividades espaciales de relativa quietud. Estas zonas separan vastas galaxias que giran velozmente alrededor del Paraíso en precisa y ordenada procesión. 

Vosotros podéis concebir el primer nivel del espacio exterior, donde incalculables universos están ahora en proceso de formación, como vasta procesión de galaxias que giran alrededor del Paraíso, limitadas hacia arriba y abajo por zonas en reposo del espacio intermedio y limitadas en márgenes interior y exterior, por zonas de espacio relativamente quietas. Un nivel espacial funciona pues como región elíptica de movimiento rodeada por todas partes por inmovilidad relativa. Tales relaciones de movimiento y reposo constituyen una senda espacial curva de menor resistencia a la iniciativa, senda universalmente seguida por fuerza cósmica y energía emergente mientras giran alrededor de la Isla del Paraíso. Esta zonificación alternada del universo maestro, asociada con el flujo alternado de galaxias, en el sentido de las manecillas del reloj y en sentido contrario, es factor en la estabilización de la gravedad física, concebido para prevenir el aumento de presión de la gravedad hasta el punto de producirse actividades disruptivas o de dispersión. Este mecanismo ejerce influencia antigravitacional y actúa como freno sobre velocidades que de otro modo serían peligrosas.
8. LA GRAVEDAD DEL PARAÍSO
La atracción inescapable de la gravedad mantiene eficazmente aferrados a mundos de universos del espacio absolutos. La gravedad es atracción todopoderosa de la presencia física del Paraíso. La gravedad es la cuerda extensa y móvil omnipotente donde están ensartadas brillantes estrellas, soles llameantes y esferas rodantes que constituyen el ornamento físico universal del Dios eterno, quien es todas las cosas, llena todas las cosas y quien radican todas las cosas. El centro y foco de gravedad material absoluta es la Isla del Paraíso, complementada por cuerpos oscuros de gravedad, que rodean Havona y equilibrada por depósitos de espacio inferior y superior. 

Todas emanaciones conocidas del bajo Paraíso invariable e infaliblemente responden a la atracción de la gravedad central que opera en circuitos interminables de niveles espaciales elípticos del universo maestro. Toda forma conocida de la realidad cósmica, tiene la inclinación de las edades. El giro del círculo. El arco de oscilación de la gran elipse. El espacio no responde a la gravedad. Pero actúa como equilibrador de gravedad. Sin el amortiguador del espacio la acción explosiva sacudiría cuerpos espaciales circundantes. El espacio ocupado también ejerce influencia antigravitacional sobre gravedad física o lineal. El espacio puede neutralizar la acción de la gravedad, aunque no puede diferirla. La gravedad absoluta es la gravedad del Paraíso. La gravedad local o lineal, pertenece a la etapa eléctrica de energía o materia. Opera dentro del universo central, superuniversos y universos exteriores, donde quiera que haya tenido lugar adecuada materialización. Las numerosas formas de fuerza cósmica, de la energía física, del poder universal y diversas materializaciones, revelan tres etapas generales de respuesta a la gravedad del Paraíso, aunque no perfectamente delineadas:
1. Etapas pregravitacionales (fuerza): Éste es el primer paso en la individualización de la potencia espacial en formas de fuerza cósmica preenergéticas. Este estado es análogo al concepto de la carga de fuerza primordial del espacio, a veces llamada energía pura o segregata.
2. Etapas gravitacionales (energía): Esta modificación de la carga de fuerza del espacio se produce por acción de organizadores paradisiacos de fuerza. Señala la aparición de sistemas de energía que responden a la atracción de la gravedad del Paraíso. Esta energía emergente es originalmente neutral. Pero después de metamorfosis ulteriores mostrará las llamadas cualidades positivas y negativas. Designamos entonces estas etapas ultimata.
3. Etapas postgravitacionales (poder del universo o poder universal): En esta etapa, la energía-materia revela una respuesta al control de la gravedad lineal. En el universo central, estos sistemas físicos son organizaciones triples conocidas como triata. Son ellos sistemas maternos de superpoder de creaciones del tiempo y el espacio. Los sistemas físicos de superuniversos son movilizados por Directores del Poder Universal y sus asociados. Estas organizaciones materiales -según estas revelaciones- son duales en su constitución y se conocen como gravita. Los cuerpos oscuros de gravedad que rodean Havona no son ni triata ni gravita y su poder de atracción revela ambas formas de gravedad física, la lineal y la absoluta. La potencia del espacio no está sujeta a interacciones de ninguna forma de gravitación. Esta dote original del Paraíso, no es un auténtico nivel de realidad. Pero es ancestral a todas realidades funcionales no espirituales relativas, todas manifestaciones de fuerza-energía y organización de poder y materia. La potencia espacial es un término difícil de definir. No significa aquello que es ancestral al espacio, su significado debe transmitir la idea de potencias y potenciales existentes dentro del espacio. Podría concebirse, burdamente, como incluyendo a todas influencias y potenciales absolutos que emanan del Paraíso y constituyen la presencia espacial del Absoluto No Cualificado. El Paraíso es la fuente absoluta y punto focal eterno de toda energía-materia en el universo de los universos. El Absoluto No Cualificado es el revelador, regulador y depositario de aquello que tiene al Paraíso como fuente y origen. La presencia universal del Absoluto No 

Cualificado, parece ser equivalente al concepto de infinidad potencial de extensión de la gravedad, una tensión elástica de la presencia del Paraíso. Este concepto ayuda a comprender el hecho de que todas las cosas son atraídas hacia el Paraíso. Comprendemos la ilustración es cruda e imposible de comprobar a nivel pensante del mortal evolucionario Urantiano. Pero sin embargo es útil como referencia. También explica por qué la gravedad prefiere actuar en el plano perpendicular de la masa, fenómeno indicativo de dimensiones diferenciales del Paraíso y creaciones que lo expanden.
José Revello
(Fragmentos de: “Mis tardes con Don Genaro”)
Derechos de autor Reservados
El tiempo del no tiempo
Según Don Genaro
HISTORIA DE LA ETERNIDAD. (Formación decimal astronómica)
Fragmento-73
LAS FUNCIONES ESPACIALES DEL PARAÍSO
“El espacio no existe en ninguna de las superficies del Paraíso. Si uno «mirara» hacia arriba desde la superficie superior del Paraíso, no «vería» nada sino espacio desocupado que entra o sale y que, en este momento, entra. El espacio no toca el Paraíso, sólo las zonas quiescentes (es decir está quieto pero pudiendo tener movimiento. Quiescencia) del espacio intermedio entran en contacto con la Isla central. El Paraíso es realmente el núcleo inmóvil de zonas relativamente quietas que existen entre el espacio ocupado y espacio desocupado. Geográficamente -continúan estas brillantes entidades de Uversa- estas zonas parecen ser extensión relativa del Paraíso. Pero probablemente tengan algún movimiento. Sabemos muy poco acerca de ellas. Pero observamos estas zonas de reducida moción espacial separan el espacio ocupado del espacio desocupado. Zonas similares existieron antaño entre niveles del espacio ocupado. Pero ahora son menos quiescentes. Un corte vertical del espacio total se asemejaría ligeramente a la cruz maltesa donde brazos horizontales representan el espacio ocupado (universo) y brazos verticales representan el espacio desocupado (depósito). 

Las áreas entre cuatro brazos los separarían en forma semejante a zonas del espacio intermedio separan el espacio ocupado del desocupado. Estas zonas quietas del espacio intermedio se van agrandando más a medida que aumenta la distancia del Paraíso y, finalmente, abarcan fronteras de todo el espacio y encierran completamente, los depósitos espaciales, como toda la extensión horizontal del espacio ocupado. El espacio no es ni una condición subabsoluta dentro del Absoluto No Cualificado, ni la presencia de éste, ni tampoco es función del Último. Es una dádiva del Paraíso y se cree el espacio del gran universo y todas regiones exteriores verdaderamente se impregnan de ancestral potencia espacial del Absoluto No Cualificado. 



Desde un acceso cercano al Paraíso periférico este espacio ocupado, se extiende horizontalmente hacia afuera a través del cuarto nivel espacial y más allá de la periferia del universo maestro. Pero no sabemos cuánto más alla. Si imagináis un plano en forma de V finito, pero inconcebiblemente grande, ubicado en ángulo recto, respecto de superficie superior e inferior del Paraíso con la punta casi tangente al Paraíso Periférico y luego imaginad ese plano en revolución elíptica alrededor del Paraíso, su revolución esbozaría aproximadamente el volumen del espacio ocupado. Hay un límite superior y límite inferior del espacio horizontal con referencia a cualquier lugar dado en los universos. Si uno pudiera moverse lo bastante lejos en ángulo recto respecto del plano de Orvonton, ya sea hacia arriba o hacia abajo, podría encontrar finalmente el límite superior o inferior del espacio ocupado. Dentro de dimensiones conocidas del universo maestro, estos límites se separan cada vez más del Paraíso. El espacio se espesa poco más rápidamente que el plano de la creación, los universos. Las zonas relativamente quietas entre niveles del espacio, tal como la que separa a los siete superuniversos del primer nivel del espacio exterior, son enormes regiones elípticas de actividades espaciales de relativa quietud. Estas zonas separan vastas galaxias que giran velozmente alrededor del Paraíso en precisa y ordenada procesión. 

Vosotros podéis concebir el primer nivel del espacio exterior, donde incalculables universos están ahora en proceso de formación, como vasta procesión de galaxias que giran alrededor del Paraíso, limitadas hacia arriba y abajo por zonas en reposo del espacio intermedio y limitadas en márgenes interior y exterior, por zonas de espacio relativamente quietas. Un nivel espacial funciona pues como región elíptica de movimiento rodeada por todas partes por inmovilidad relativa. Tales relaciones de movimiento y reposo constituyen una senda espacial curva de menor resistencia a la iniciativa, senda universalmente seguida por fuerza cósmica y energía emergente mientras giran alrededor de la Isla del Paraíso. Esta zonificación alternada del universo maestro, asociada con el flujo alternado de galaxias, en el sentido de las manecillas del reloj y en sentido contrario, es factor en la estabilización de la gravedad física, concebido para prevenir el aumento de presión de la gravedad hasta el punto de producirse actividades disruptivas o de dispersión. Este mecanismo ejerce influencia antigravitacional y actúa como freno sobre velocidades que de otro modo serían peligrosas.
8. LA GRAVEDAD DEL PARAÍSO
La atracción inescapable de la gravedad mantiene eficazmente aferrados a mundos de universos del espacio absolutos. La gravedad es atracción todopoderosa de la presencia física del Paraíso. La gravedad es la cuerda extensa y móvil omnipotente donde están ensartadas brillantes estrellas, soles llameantes y esferas rodantes que constituyen el ornamento físico universal del Dios eterno, quien es todas las cosas, llena todas las cosas y quien radican todas las cosas. El centro y foco de gravedad material absoluta es la Isla del Paraíso, complementada por cuerpos oscuros de gravedad, que rodean Havona y equilibrada por depósitos de espacio inferior y superior. 

Todas emanaciones conocidas del bajo Paraíso invariable e infaliblemente responden a la atracción de la gravedad central que opera en circuitos interminables de niveles espaciales elípticos del universo maestro. Toda forma conocida de la realidad cósmica, tiene la inclinación de las edades. El giro del círculo. El arco de oscilación de la gran elipse. El espacio no responde a la gravedad. Pero actúa como equilibrador de gravedad. Sin el amortiguador del espacio la acción explosiva sacudiría cuerpos espaciales circundantes. El espacio ocupado también ejerce influencia antigravitacional sobre gravedad física o lineal. El espacio puede neutralizar la acción de la gravedad, aunque no puede diferirla. La gravedad absoluta es la gravedad del Paraíso. La gravedad local o lineal, pertenece a la etapa eléctrica de energía o materia. Opera dentro del universo central, superuniversos y universos exteriores, donde quiera que haya tenido lugar adecuada materialización. Las numerosas formas de fuerza cósmica, de la energía física, del poder universal y diversas materializaciones, revelan tres etapas generales de respuesta a la gravedad del Paraíso, aunque no perfectamente delineadas:
1. Etapas pregravitacionales (fuerza): Éste es el primer paso en la individualización de la potencia espacial en formas de fuerza cósmica preenergéticas. Este estado es análogo al concepto de la carga de fuerza primordial del espacio, a veces llamada energía pura o segregata.
2. Etapas gravitacionales (energía): Esta modificación de la carga de fuerza del espacio se produce por acción de organizadores paradisiacos de fuerza. Señala la aparición de sistemas de energía que responden a la atracción de la gravedad del Paraíso. Esta energía emergente es originalmente neutral. Pero después de metamorfosis ulteriores mostrará las llamadas cualidades positivas y negativas. Designamos entonces estas etapas ultimata.
3. Etapas postgravitacionales (poder del universo o poder universal): En esta etapa, la energía-materia revela una respuesta al control de la gravedad lineal. En el universo central, estos sistemas físicos son organizaciones triples conocidas como triata. Son ellos sistemas maternos de superpoder de creaciones del tiempo y el espacio. Los sistemas físicos de superuniversos son movilizados por Directores del Poder Universal y sus asociados. Estas organizaciones materiales -según estas revelaciones- son duales en su constitución y se conocen como gravita. Los cuerpos oscuros de gravedad que rodean Havona no son ni triata ni gravita y su poder de atracción revela ambas formas de gravedad física, la lineal y la absoluta. La potencia del espacio no está sujeta a interacciones de ninguna forma de gravitación. Esta dote original del Paraíso, no es un auténtico nivel de realidad. Pero es ancestral a todas realidades funcionales no espirituales relativas, todas manifestaciones de fuerza-energía y organización de poder y materia. La potencia espacial es un término difícil de definir. No significa aquello que es ancestral al espacio, su significado debe transmitir la idea de potencias y potenciales existentes dentro del espacio. Podría concebirse, burdamente, como incluyendo a todas influencias y potenciales absolutos que emanan del Paraíso y constituyen la presencia espacial del Absoluto No Cualificado. El Paraíso es la fuente absoluta y punto focal eterno de toda energía-materia en el universo de los universos. El Absoluto No Cualificado es el revelador, regulador y depositario de aquello que tiene al Paraíso como fuente y origen. La presencia universal del Absoluto No 

Cualificado, parece ser equivalente al concepto de infinidad potencial de extensión de la gravedad, una tensión elástica de la presencia del Paraíso. Este concepto ayuda a comprender el hecho de que todas las cosas son atraídas hacia el Paraíso. Comprendemos la ilustración es cruda e imposible de comprobar a nivel pensante del mortal evolucionario Urantiano. Pero sin embargo es útil como referencia. También explica por qué la gravedad prefiere actuar en el plano perpendicular de la masa, fenómeno indicativo de dimensiones diferenciales del Paraíso y creaciones que lo expanden.
José Revello
(Fragmentos de: “Mis tardes con Don Genaro”)
Derechos de autor Reservados
El tiempo del no tiempo
Según Don Genaro
HISTORIA DE LA ETERNIDAD. (Formación decimal astronómica)
Fragmento-73
LAS FUNCIONES ESPACIALES DEL PARAÍSO
“El espacio no existe en ninguna de las superficies del Paraíso. Si uno «mirara» hacia arriba desde la superficie superior del Paraíso, no «vería» nada sino espacio desocupado que entra o sale y que, en este momento, entra. El espacio no toca el Paraíso, sólo las zonas quiescentes (es decir está quieto pero pudiendo tener movimiento. Quiescencia) del espacio intermedio entran en contacto con la Isla central. El Paraíso es realmente el núcleo inmóvil de zonas relativamente quietas que existen entre el espacio ocupado y espacio desocupado. Geográficamente -continúan estas brillantes entidades de Uversa- estas zonas parecen ser extensión relativa del Paraíso. Pero probablemente tengan algún movimiento. Sabemos muy poco acerca de ellas. Pero observamos estas zonas de reducida moción espacial separan el espacio ocupado del espacio desocupado. Zonas similares existieron antaño entre niveles del espacio ocupado. Pero ahora son menos quiescentes. Un corte vertical del espacio total se asemejaría ligeramente a la cruz maltesa donde brazos horizontales representan el espacio ocupado (universo) y brazos verticales representan el espacio desocupado (depósito). 

Las áreas entre cuatro brazos los separarían en forma semejante a zonas del espacio intermedio separan el espacio ocupado del desocupado. Estas zonas quietas del espacio intermedio se van agrandando más a medida que aumenta la distancia del Paraíso y, finalmente, abarcan fronteras de todo el espacio y encierran completamente, los depósitos espaciales, como toda la extensión horizontal del espacio ocupado. El espacio no es ni una condición subabsoluta dentro del Absoluto No Cualificado, ni la presencia de éste, ni tampoco es función del Último. Es una dádiva del Paraíso y se cree el espacio del gran universo y todas regiones exteriores verdaderamente se impregnan de ancestral potencia espacial del Absoluto No Cualificado. 



Desde un acceso cercano al Paraíso periférico este espacio ocupado, se extiende horizontalmente hacia afuera a través del cuarto nivel espacial y más allá de la periferia del universo maestro. Pero no sabemos cuánto más alla. Si imagináis un plano en forma de V finito, pero inconcebiblemente grande, ubicado en ángulo recto, respecto de superficie superior e inferior del Paraíso con la punta casi tangente al Paraíso Periférico y luego imaginad ese plano en revolución elíptica alrededor del Paraíso, su revolución esbozaría aproximadamente el volumen del espacio ocupado. Hay un límite superior y límite inferior del espacio horizontal con referencia a cualquier lugar dado en los universos. Si uno pudiera moverse lo bastante lejos en ángulo recto respecto del plano de Orvonton, ya sea hacia arriba o hacia abajo, podría encontrar finalmente el límite superior o inferior del espacio ocupado. Dentro de dimensiones conocidas del universo maestro, estos límites se separan cada vez más del Paraíso. El espacio se espesa poco más rápidamente que el plano de la creación, los universos. Las zonas relativamente quietas entre niveles del espacio, tal como la que separa a los siete superuniversos del primer nivel del espacio exterior, son enormes regiones elípticas de actividades espaciales de relativa quietud. Estas zonas separan vastas galaxias que giran velozmente alrededor del Paraíso en precisa y ordenada procesión. 

Vosotros podéis concebir el primer nivel del espacio exterior, donde incalculables universos están ahora en proceso de formación, como vasta procesión de galaxias que giran alrededor del Paraíso, limitadas hacia arriba y abajo por zonas en reposo del espacio intermedio y limitadas en márgenes interior y exterior, por zonas de espacio relativamente quietas. Un nivel espacial funciona pues como región elíptica de movimiento rodeada por todas partes por inmovilidad relativa. Tales relaciones de movimiento y reposo constituyen una senda espacial curva de menor resistencia a la iniciativa, senda universalmente seguida por fuerza cósmica y energía emergente mientras giran alrededor de la Isla del Paraíso. Esta zonificación alternada del universo maestro, asociada con el flujo alternado de galaxias, en el sentido de las manecillas del reloj y en sentido contrario, es factor en la estabilización de la gravedad física, concebido para prevenir el aumento de presión de la gravedad hasta el punto de producirse actividades disruptivas o de dispersión. Este mecanismo ejerce influencia antigravitacional y actúa como freno sobre velocidades que de otro modo serían peligrosas.
8. LA GRAVEDAD DEL PARAÍSO
La atracción inescapable de la gravedad mantiene eficazmente aferrados a mundos de universos del espacio absolutos. La gravedad es atracción todopoderosa de la presencia física del Paraíso. La gravedad es la cuerda extensa y móvil omnipotente donde están ensartadas brillantes estrellas, soles llameantes y esferas rodantes que constituyen el ornamento físico universal del Dios eterno, quien es todas las cosas, llena todas las cosas y quien radican todas las cosas. El centro y foco de gravedad material absoluta es la Isla del Paraíso, complementada por cuerpos oscuros de gravedad, que rodean Havona y equilibrada por depósitos de espacio inferior y superior. 

Todas emanaciones conocidas del bajo Paraíso invariable e infaliblemente responden a la atracción de la gravedad central que opera en circuitos interminables de niveles espaciales elípticos del universo maestro. Toda forma conocida de la realidad cósmica, tiene la inclinación de las edades. El giro del círculo. El arco de oscilación de la gran elipse. El espacio no responde a la gravedad. Pero actúa como equilibrador de gravedad. Sin el amortiguador del espacio la acción explosiva sacudiría cuerpos espaciales circundantes. El espacio ocupado también ejerce influencia antigravitacional sobre gravedad física o lineal. El espacio puede neutralizar la acción de la gravedad, aunque no puede diferirla. La gravedad absoluta es la gravedad del Paraíso. La gravedad local o lineal, pertenece a la etapa eléctrica de energía o materia. Opera dentro del universo central, superuniversos y universos exteriores, donde quiera que haya tenido lugar adecuada materialización. Las numerosas formas de fuerza cósmica, de la energía física, del poder universal y diversas materializaciones, revelan tres etapas generales de respuesta a la gravedad del Paraíso, aunque no perfectamente delineadas:
1. Etapas pregravitacionales (fuerza): Éste es el primer paso en la individualización de la potencia espacial en formas de fuerza cósmica preenergéticas. Este estado es análogo al concepto de la carga de fuerza primordial del espacio, a veces llamada energía pura o segregata.
2. Etapas gravitacionales (energía): Esta modificación de la carga de fuerza del espacio se produce por acción de organizadores paradisiacos de fuerza. Señala la aparición de sistemas de energía que responden a la atracción de la gravedad del Paraíso. Esta energía emergente es originalmente neutral. Pero después de metamorfosis ulteriores mostrará las llamadas cualidades positivas y negativas. Designamos entonces estas etapas ultimata.
3. Etapas postgravitacionales (poder del universo o poder universal): En esta etapa, la energía-materia revela una respuesta al control de la gravedad lineal. En el universo central, estos sistemas físicos son organizaciones triples conocidas como triata. Son ellos sistemas maternos de superpoder de creaciones del tiempo y el espacio. Los sistemas físicos de superuniversos son movilizados por Directores del Poder Universal y sus asociados. Estas organizaciones materiales -según estas revelaciones- son duales en su constitución y se conocen como gravita. Los cuerpos oscuros de gravedad que rodean Havona no son ni triata ni gravita y su poder de atracción revela ambas formas de gravedad física, la lineal y la absoluta. La potencia del espacio no está sujeta a interacciones de ninguna forma de gravitación. Esta dote original del Paraíso, no es un auténtico nivel de realidad. Pero es ancestral a todas realidades funcionales no espirituales relativas, todas manifestaciones de fuerza-energía y organización de poder y materia. La potencia espacial es un término difícil de definir. No significa aquello que es ancestral al espacio, su significado debe transmitir la idea de potencias y potenciales existentes dentro del espacio. Podría concebirse, burdamente, como incluyendo a todas influencias y potenciales absolutos que emanan del Paraíso y constituyen la presencia espacial del Absoluto No Cualificado. El Paraíso es la fuente absoluta y punto focal eterno de toda energía-materia en el universo de los universos. El Absoluto No Cualificado es el revelador, regulador y depositario de aquello que tiene al Paraíso como fuente y origen. La presencia universal del Absoluto No 

Cualificado, parece ser equivalente al concepto de infinidad potencial de extensión de la gravedad, una tensión elástica de la presencia del Paraíso. Este concepto ayuda a comprender el hecho de que todas las cosas son atraídas hacia el Paraíso. Comprendemos la ilustración es cruda e imposible de comprobar a nivel pensante del mortal evolucionario Urantiano. Pero sin embargo es útil como referencia. También explica por qué la gravedad prefiere actuar en el plano perpendicular de la masa, fenómeno indicativo de dimensiones diferenciales del Paraíso y creaciones que lo expanden.
José Revello
(Fragmentos de: “Mis tardes con Don Genaro”)
Derechos de autor Reservados

La leyenda de la Pachamama

Pachacamac desde el cielo
su bella mujer reclama,
desde el aire Pachamama
se derrama por el suelo.
Triste llora el desconsuelo
y al horizonte està unido,
hay un gesto compungido
quieren el sol y la luna,
borrar la mala fortuna
por la madre que han perdido.

Huaychao, que es ave del Ande
saludando al sol naciente
esperarà que al poniente,
la luna reflejos mande.
Mientras el Volcàn expande
lànguida lengua de fuego,
Wacòn por mal, deja al ruego
su amenaza destructora,
el Inca, se inclina y llora
mostrando a la Pacha apego.




1º DE AGOSTO, DIA DE LA PACHAMAMA (MADRE TIERRA)

Hugo Castro, en Azul,
a 1º de Agosto de 2017.-

Aves

Cuando comienzas a hablar,
tu voz serena y temprana
se me asemeja al trinar
del melodioso zorzal
al despuntar la mañana.

Tu acento tiene el matiz
y el brillo de una perlita,
que vas soltando en un tris
como el gorjeo feliz
de la locuaz tacuarita.

Tu pelo en ondas desprende
rubios destellos soñados,
cuyos vaivenes sorprenden
y al nuevo día lo encienden
como el jilguero dorado.

Rojos tus labios melosos
me vuelven como borracho
luciendo su don garboso,
tal luce así de orgulloso
el cardenal su penacho.

Con el viento misionero
vuela tu risa en poesía
y va cubriendo el sendero,
como el silbar del hornero
de argentina melodía.

Tus ojos de azul desvelo
reflejan por sus retinas
la libertad de los cielos,
así es el límpido vuelo
de la veloz golondrina.

Y escucho en tu voz las notas
tan claras en sus aprontes
cual trino fiel del sinsonte,
que atravesando las copas
escapa a través del monte.

Suenan tus cuerdas, preciosa,
con estridencias y graves,
porque atesoran tus claves
por dentro y fuera, dichosa,
¡canto y color de las aves!

Aves que revuelan el anaranjado atardecer.


Autor:  José Luis Arias

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